9 de julio de 2012

The Amazing Spider-Man (2012)

Como Spider-Man dijo una vez: "¡Tu sico-rayo no servirá de nada si no me alcanza!"; una frase en apariencia trivial, pero que esconde una sutil metáfora sobre el escándalo de Watergate.

Vale, he mentido. No es una metáfora de nada y tampoco viene al caso. Solo quería romper el hielo.

Para los que busquen una crítica rápida, seré conciso y claro: os habéis equivocado de blog. Al resto, empezaré por decirle que la película me ha gustado. Luego os diré cuánto.

A priori, y como comparar es fácil, puedo adelantaros que aunque la bisoñez de Marc Webb como director hace que su impronta personal sea difusa, The Amazing Spider-Man se alza con voz propia y supera a la trilogía de Sam Raimi en muchos aspectos. Cosa fácil desde el punto de vista de cualquiera que, como yo, tuviese tirria a Tobey Maguire y a Kirsten Dunst. Y supongo que no hace falta que diga que la película es infinitamente mejor que el telefilme de 1977 del que hablamos la semana pasada, porque incluso los vídeos domésticos que grababa mi padre sin quitar la tapa del objetivo son más entretenidos que eso.

Por lo tanto, y como punto de partida, es meritorio que los guionistas hayan conseguido reescribir el origen del personaje sin aburrirnos hasta la muerte, diferenciándose de la versión de Sam Raimi, pero respetando las partes esenciales de la historieta de Stan Lee y Steve Dikto.

Personalmente, hubiera preferido que resumiesen el origen en dos minutos con cuatro paneles mal contados, como en El increíble Hulk de Louis Leterrier, y que entrasen a saco con Spidey impidiendo algún trapicheo de la mafia o atrapando a algún supervillano de segunda; pero partiendo de que se trata de un reinicio de la franquicia, creo que han hecho un trabajo notable en distinguirse del Spider-Man de Raimi.

Quizá precisamente para distanciarse de una película que, pese a tener ya diez años, aún está fresca en la memoria de muchos espectadores, las distribuidoras han intentado vendernos The Amazing Spider-Man como una versión nunca contada de la historia de Peter Parker. Así se desprende, sin ir más lejos, de la sinopsis oficial que hay en la página de Sony España:

"Como la mayoría de adolescentes de su edad, Peter está tratando de averiguar quién es y cómo ha llegado a ser la persona que es hoy. En su viaje para juntar las piezas de su pasado, descubre un secreto que su padre tenía... un secreto que al final, marcará su destino como Spider-Man".

Suena diferente, ¿verdad? Pues seguid leyendo, seguid... mwahahahahaha.

Sorpresa: en esta nueva adaptación, el tío Ben no muere, sino que inicia su carrera presidencial.

Respecto del reparto, todos los actores son buenos y existe una gran química entre ellos. Sé de lo que hablo, porque de pequeño me compraron mi propio laboratorio casero.

Vale, no me compraron ningún laboratorio. Pero una vez, probé el Quimicefa en casa de un amigo.

Está bien. Lo vi en un anuncio. Mis padres no me hubieran dejado acercarme a elementos inflamables o sustancias que pudieran provocar reacciones violentas ni atado a una silla.

Andrew Garfield y Emma Stone interpretan respectivamente a Peter Parker y Gwen Stacy, y si bien a veces parece que estén compitiendo en un concurso de muecas para pacientes con trartorno crónico de tic motor (el uso del lenguaje corporal debería tener límites), consiguen dotar de credibilidad y carisma a las versiones adolescentes de estos personajes .

El resto del reparto también está a buen nivel. Rhys Ifans cumple como villano trágico, Denis Leary es un capitán Stacy que parte el bacalao, y Martin Sheen nos ofrece un tío Ben de lujo que, en la medida de lo posible, aporta carisma a un personaje que es puro cliché.

La excepción a la regla es Sally Field, que, pese a su talento, lamentablemente no tiene nada que aportar a la película, y aparte de demostrar que no es tan ingenua como la tía May de las viñetas y recordarme a Robin Williams travestido en Señora Doubtfire, no hace nada que merezca la pena mencionar.

Como el cielo abierto cuando nadie lo esperaba,
como esa palabra que estremece a mi razón...

En el apartado visual, nos dan una de cal y otra de arena. La acción es más bien regulera y la ambientación bebe demasiado de El Caballero Oscuro; pero, por otro lado, Spidey nunca se había movido de forma tan parecida a la de los tebeos, con acrobacias y poses que me recuerdan a los escorzos improbables que Todd McFarlane puso de moda en los noventa. Mola.

Por lo demás, tenemos escenas emotivas que funcionan (casi suelto una lagrimilla con la muerte del tío Ben, sin ser yo de tener sentimientos y eso), secuencias de acción en las que uno sabe lo que está pasando, algunos momentos icónicos (a destacar, el rescate del niño en el puente, muy típico de nuestro héroe en las viñetas), comentarios socarrones en plena faena heroica, y el cameo más divertido de Stan Lee hasta la fecha.

¡Y palomas nocturnas! ¡Muérete de envidia, John Woo!

Entre los detalles que pensaba que me disgustarían y, al final, ni fu ni fa, están el diseño del Lagarto y el nuevo traje de Spider-Man. El Lagarto, con la cabeza redonda y el morro achatado, me sigue recordando a los goombas de la película de Super Mario Bros., y hubiera preferido que optasen por un aspecto más jurásico; pero al menos lleva la bata de laboratorio en un par de escenas, que son más de las que me esperaba.

En cuanto al traje de Spider-Man, si bien los pequeños cambios siguen sin convencerme, lo cierto es que con tanto salto de aquí para allá y tanta escena rodada de noche, uno no se fija realmente en la ausencia de "cinturón", ni en las líneas rojas de más, ni en los zapatos de claqué; lo único que quizá llama la atención es que los oculares son más oscuros de lo habitual, parecidos a los del arte conceptual de Alex Ross para aquel proyecto perdido de James Cameron. Además, me gusta que el traje se le arrugue y acabe hecho unos zorros. Le da un aire cutre y realista.

Para la secuela, batín y pipa.

Dicho todo lo anterior, a partir de aquí se acabó el dorar la píldora a la película, que me vais a ir engañados al cine y no me pagan por vender entradas. Por lo tanto, toca hablar de los aspectos negativos, defectos que, si bien no empañan el conjunto del filme, lo desmejoran lo suficiente como para que al salir de la sala uno diga "Meh" y se encoja de hombros.

Empezando quizá por lo menos malo, la relación entre Peter y Gwen está claramente enfocada a quinceañeros que se encoñan por primera vez y es más empalagosa que un Oso Amoroso en San Valentín. A las chavalas, él les parecerá adorable y mono; y los chicos, si son prácticos, pensarán "¡Jodé, comostá la Güen, tronco!" y se encerrarán en el cuarto de baño con un paquete de pañuelos. Yo solo disfruté del momento Indiana Jones en el que Peter engancha a Gwen lanzándole la telaraña al culo para plantarle un beso en todo el morro.

A título personal, añadiré además que como los primeros cómics que leí de Spider-Man fueron los publicados en los años ochenta, este Peter Parker skater y neurasténico no es santo de mi devoción. Yo era más del Peter rompecorazones que no podía pagar el alquiler, trabajaba como fotógrafo para el Daily Bugle, se las veía y deseaba para sacarse el doctorado y siempre encontraba el frigorífico vacío cuando llegaba a casa. Pero supongo que el Peter juvenil y desorientado en busca de su propia identidad llena más butacas.

-Peter, te quiero mucho, como la trucha al trucho.
-Ukk... Creo que acabo de vomitarme un poco en la máscara.

Un problema más notable, y al que no quería adelantarme cuando copié la sinopsis, es que se ve a la legua que la posproducción ha convertido lo que pintaba como un giro al origen tradicional de Spider-Man en una adaptación más de la historia que ya nos han contado mil veces tanto en las películas, como en los tebeos.

En este sentido, los tráileres y las entrevistas parecían hablar de caminos que finalmente no se toman en la versión estrenada en cines. Los recortes, en el mejor de los casos, nos dejan con la miel en los labios (por ejemplo, inicialmente estaba planeado que J.K. Simmons retomase el papel de J. Jonah Jameson) y, en el peor de ellos, crean lagunas del tamaño de Alaska, como el hecho de que, en teoría, puedan surgir tantos hombres-araña como idiotas se dejen picar por las arañas radiactivas que hay en el laboratorio de Oscorp, pese a que los tráileres apuntaban a que el ADN de Peter ya había sido alterado en el pasado, probablemente por su padre, y que la picadura de araña solo actuaba como desencadenante. Si os fijáis biem, algo de esto se mantiene en la versión final, pero la idea no se desarrolla.

El resultado es una película en tres partes con escasa conexión entre ellas: en la primera parte, Peter trata de desvelar el misterio que hay tras la desaparición de sus padres; en la segunda, pasamos a ver cómo Peter experimenta con sus poderes mientras trata de asumir la pérdida de su tío Ben; y en la última parte, nos olvidamos de todo lo anterior, para centrarnos en Spider-Man luchando contra el Lagarto e intentando detener sus planes.

Una muestra de lo deslavazada que está la película se ve cuando el tío Ben le suelta a Peter su rollo sobre la responsabilidad, y éste replica, muy resentido, que ojalá su padre tuviera alguna y se encontrara con él ahora. Salvo que Peter esté pensando en algún ritual vudú para resucitar a los muertos, no creo que sea la frase más oportuna teniendo en cuenta que sus padres palmaron en un accidente de aviación; en cambio, si se esfumaron sin más, su respuesta tendría sentido. De hecho, el único indicio de que los padres de Peter están muertos es un artículo de prensa que apenas sale unos segundos en pantalla; el resto de la película parece indicar que simplemente están más perdidos que Wally.

Por lo tanto, y pese a las apariencias, más que un reinicio de la franquicia, da la impresión de que estamos ante un simple remake del Spider-Man de Sam Raimi. Por eso, dentro de unos meses, me gustaría ver un montaje del director que rellene al menos los huecos más flagrantes. O tal vez una edición extendida con el equipo de lagartos-SWAT causando estragos en Nueva York, zampándose a la gente y colándose sin billete en el metro. Por pedir que no quede.

Este momento, en cambio, que lo eliminen para siempre de mi vida.

También hay que señalar que aunque las ocurrencias de Spidey siempre serán bien recibidas por los seguidores del cómic, en la película no funcionan todo lo bien que deberían. Los tráileres han machacado tanto la escena del ladrón de coches que le han quitado toda la gracia que podía tener, y durante la pelea con el Lagarto en el instituto, que para mí es uno de los puntos álgidos del filme, los chistes suenan forzados y fuera de lugar.

Y ahora, pasamos ya a lo peor de lo peor, la clase de momento que provoca que gires la cabeza hacia la persona que se sienta en la butaca de al lado intentando descubrir si es cosa tuya, o de verdad estás viendo una memez de proporciones bíblicas.

Si queréis evitar los spoilers, os recomiendo que os saltéis los próximos párrafos, porque voy a hablar de...

¡LAS PUÑETERAS GRÚAS!

No sé ni por dónde empezar con esto. Nada tiene sentido en esta escena. NADA.

La situación es la siguiente: Spider-Man necesita llegar hasta la Torre Oscorp antes de que el Lagarto convierta a todos los ciudadanos de Nueva York en reptiles con su máquina de científico loco; el problema es que han disparado a Spidey en el muslo y, por algún motivo, esto le impide balancearse en su red, aunque no hacer piruetas, correr, dar patadas o flexionar las piernas en cualquiera de las posturas contempladas en el Kamasutra.

Pero cuando todo parece perdido para nuestro amistoso vigilante, sucede el milagro: los operarios de grúa de la ciudad, que, según se ve, trabajan hasta altas horas de la noche y están deseosos de jugarse la vida por un enmascarado al que busca la policía incluso después de que ésta ordene la evacuación de la zona, alinean sus máquinas a lo largo de la calle hasta la Torre Oscorp para que Spider-Man se balancee hasta él. ¿Que no podía balancearse? No entre edificios, pero es que con grúas es distinto. Lo es y punto.

Y lo más ridículo es que toda la operación la organiza en un instante el padre del niño al que salva Spidey en el puente de Manhattan. El individuo, además de tener un poder de convicción sin precedentes (imaginaos que sois el operario de grúa que recibe una llamada pidiéndoos que os expongáis a un agente tóxico para salvar a un saltimbanqui, ¿le dirías que sí?), tiene el don de la oportunidad, porque aparece justo cuando nuestro héroe está a punto de decorar el asfalto con un Pollock de sangre y sesos. Es un instante que, de tan forzado, da risa. Si el tipo llega a levantarle el pulgar a Spider-Man, salgo de la sala.

Sencillamente nefando.

Supongo que si tuviera que puntuar esta película en una escala de Australopithecus a Homo Sapiens, le daría un Homo Erectus, o, para que nos entendamos, un 6 sobre 10. Está por encima de la media dentro del subgénero de superhéroes y resulta entretenida, pero tiene un guión que, diseccionado mínimamente, ofrece menos de lo que prometía, y su excesivo tono adolescente juega en su contra de cara al público más adulto. Sumadle a lo anterior una dirección tirando a floja y una alarmante ausencia de sorpresas, y obtendréis un claro ejemplo de película para ver directamente en vídeo.

Por último, si por algún casual entráis en el cine esperando ver algo similar a Los Vengadores de Joss Whedon, ya os adelanto que os va a decepcionar. The Amazing Spider-Man no es una montaña rusa de acción trepidante y chascarrillos constantes, sino una historia de descubrimiento personal edulcorada con mucho romance, algo de acción y 1.000 elefantes arañas juntas en escena.

18 comentarios

  1. Mr Roboto9/7/12 00:21

    En resumidas cuentas: que en menos de dos semanas estrenan la última de Batman. Lo mejor que podrían hacer con Spiderman la gente del cine es darle un cameo en la próxima de Los Vengadores como mascota de Tony Stark y dejar de darle papeles protagonistas.

    ResponderEliminar
  2. -Para mí Rosemary Harris era una perfecta tía May, igualita que en lo comics.
    -Desde que vi al Lagarto de esta película se me figuró más a El Asesino Croc que a El Lagarto. Y aunque se parece al primer Lagarto siempre recordaré al Lagarto así y así.
    -Espero que Jonathan Simmons sí repita como J. Jonah Jameson, dieron al clavo con él.
    -Y ojalá que Willem Dafoe sea nuevamente el Duende Verde, su inestabilidad mental bien que pega.
    -Lo único positivo que le vi al traje fueron los lanza-telarañas, un diseño bastante chulo.

    Iré a verla el miércoles, espero sea una inversión por encima del MEH.

    ResponderEliminar
  3. Muy de acuerdo con tu opinión, la película en general está por encima de cualquiera de las tres dirigida por Sam Reimi. Sin embargo, tiene demasiados momentos "for the lulz" que son lagunas evidentes del guión.

    *** AVISO SPOILERS ***

    - El momento de la contraseña al entrar al laboratorio secreto
    - El momento "rescato a un crío en el puente y a los otros 23 coches que he dejado colgados que les den"
    - El momento ESTA ES LA CAMARA DE PETER PARKER
    - El momento grúas
    - El momento "no voy al entierro de tu padre para protegerte". ¿No podía haber ido al entierro, explicarle lo de la promesa y luego dejar de verla?

    Y aparte, las lagunas que comentas al pasar de una parte de la película a otra sin conexión alguna.

    ResponderEliminar
  4. Mr Roboto: Spider-Man da para películas en solitario, pero no de esta manera. Necesitan buscarse un buen guionista.

    "Mascota de Tony Stark"... Je, je, je.

    LacracraESECEFE: Por partes:

    - Sí, Rosemary Harris es igual que la tía May de los cómics: inaguantable.
    - Me gustan los calzoncillos de Croc en esa imagen. Hay que ver qué buen gusto tiene.
    - Simmons es un caricato, pero sigue siendo de lo mejor que ofrece la trilogía de Raimi.
    - Willem Dafoe, con que le fabriquen una máscara que deforme un poco sus rasgos, podría ser muy efectivo como Duende Verde. Raimi no supo sacarle todo el partido posible.
    - Para lo poco que aprovechan los lanzarredes, bien podían haber dejado los orgánicos que tanta cola trajeron.

    Johansson: Yo estuve viendo ayer partes de la segunda y de la tercera de Raimi, y no solo hay momentos de vergüenza ajena y ñoñerías a mansalva, sino auténticas tomaduras de pelo achacables a un mal guión, más incluso que en The Amazing Spider-Man.

    Respecto de los spoilers:

    - Me pareció raro que no utilizasen un lector biométrico como medida adicional de seguridad, pero tampoco fue un momento que me chocase en exceso. Peter simplemente memoriza la contraseña al verla. Lo que me hizo "gracia" es que dentro de la primera habitación hay unos bonitos trajes antiradiación colgados de una pared, y Peter pasa tranquilamente a la sala de las arañas con su ropa de calle. Yo al menos me hubiera preguntado si la sala no estaría contaminada de algún modo.
    - Creo recordar que Spider-Man se larga cuando oye sirenas, para evitar encontrarse con la policía. De todos modos, no estoy seguro y tendría que volver a ver la escena; cosa que no sucederá en el corto plazo.
    - Para mí tiene sentido. Sus tíos no son los Rockefeller del siglo XXI y él está sin un duro. Si pierde la cámara, querrá que se la devuelvan. Claro que entonces debería haber añadido una dirección.
    - Visto.
    - Yo tampoco veo el problema de que sea sincero en ese aspecto. Total, se ve que se va a pasar la promesa por el forro igualmente...

    ResponderEliminar
  5. Pues no creo que la vea... las críticas que leo por la red apuntan en líneas generales en la misma dirección... que tiene cosas que esta bien pero otras que casi dan vergüenza ajena.

    La película nunca me ha inspirado confianza, parece que quieren relanzar la saga... pero sin gastarse mucho, que quieren hacer algo original y distinto... pero no demasiado, no sea que no sea comercial.

    Y particularmente me da una pereza tremenda el tragarme otra vez todo el comienzo de Spiderman. Lo has comentado en la crítica y creo que has dado en el blanco... los créditos de "el increible Hulk" eran el camino a seguir, modélicos, con unas cuantas imagenes de una araña picando y el Peter Parker de turno escalando torpemente unas paredes ya tendrías todo lo imprescindible contado.

    pd: todavía no he visto Spiderman 3 de Raimi... pero ayer vi el pedazo del club de lo que sea en el que se pone a tocar el piano... joder, como me alegro de no haber pagado una entrada de cine para ver eso XD

    ResponderEliminar
  6. Descastado9/7/12 23:40

    Leída hasta el spoiler...

    Va y viene tanto entre lo bueno y lo malo que suena a mediocre. Creo que tenía que haber pasado más tiempo antes del 'remake', además hay esa tendencia de que tienes que hacerla oscura para ser como el Batman de Nolan. Por encima el enfoque teenager, si no es para reírme como con las consultas sexuales de la SuperPop, mala cosa.

    A ver si me animo a verla en cine.


    Saludetes

    P.d. Justo ahora ponen el trailer de Batman. Más lo veo, más dudas me deja (tanto Bane, como Catwoman no me convencen nada). Es Nolan y habrá que darle el margen de la duda (en la 2 al final la salvó con nota, y tenía muy malos pálpitos). Ojalá me equivoque pero creo que ésta Catwoman es un error de casting total.

    ResponderEliminar
  7. No entiendo eso de que no aprovecharon los webshooters, para si se hizo una parte importante de la pelicual y es demostrar que Peter es creativo, ademas me gusto el hecho de que Spiderman utilizara las telarañas para algo mas que balancearce y propulsarse.

    La parte de las gruas es mala... pero bueno, todas las peliculas de superheroes tienen momentos asi. El momento de la camara tambien...creo que es la parte mas criticable de toda la pelicula.

    Otro punto que no destacan muchos, es cuando Gwen Stacy NO es atacada por LIzard...

    La direccion y edicion de la pelicula quiza es lo que mas resta puntos, es que es como cuando haces un video casero y no hay ninguna toma continua solo cortes y cortes por todos lados.

    Mi sensacion despues tres dias es que no tengo una secuencia larga que me deje emocionado, es mas bien una secuencia de fotogramas sin orden muy chulos.

    ResponderEliminar
  8. eter: Ver en el cine Spider-Man 3 fue toda una experiencia, créeme. Comparada con ésta, The Amazing Spider-Man es casi una obra maestra.

    Descastado: No veo tanto el enfoque oscuro que dice la gente que hay. Creo que solo una cuestión de ambientación, y el tono es bastante desenfadado la mayor parte del tiempo. Además, si uno se lee cualquier cómic de Spider-Man de los ochenta y noventa, se dará cuenta de que hay muchas partes que se desarrollan de noche.

    En cuanto a la nueva de Batman, la elección de los villanos no me parece la más acertada, pero Nolan ya ha probado con creces que sabe lo que se hace, así que es mejor esperar a ver los resultados antes de pronunciarse.

    K3M#: Ya demuestran que Peter es listo de otras maneras, y en este caso, ni siquiera inventa el fluido arácnido, solo los lanzarredes. Además, éstos eran un recurso muy manido en los cómics cuando se le agotaban, mientras que aquí se los rompen en la batalla final y punto.

    Como decía, no veo tan criticable lo de la cámara. Ned Flanders también marcaba todas sus cosas. Lo estúpido es, si acaso, no quitarle la etiqueta cuando la usa como Spider-Man.

    Que el Lagarto no ataque a Gwen queda raro en el momento de verlo, pero, la verdad, si va a transformar a toda la ciudad en reptiles, ¿qué más le da dejarla en paz? Ni que fuera la responsable de crear el antídoto que finalmente estropea sus planes y hubiera intentado quemarlo vivo.

    ResponderEliminar
  9. Hola! Acabo de abrir un nuevo blog dedicado a exponer mi complementos creados con hama. Me gustaría que le echaras un vistazo a ver que te parece!

    Un saludo y muchas gracias! ^^

    http://pixelartcomplementos.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Qué maja... y qué lugar tan poco adecuado para promocionar tu proyecto. No obstante, te deseo la mejor de las suertes. Me consta que ya tienes competencia. Yo es que soy más de comprarme machetes, botas y collares de colmillos de cocodrilo.

      Eliminar
  10. Lo de Gwen de hecho lo destaco por bueno no porque sea un error.

    ResponderEliminar
  11. Después de la farsa de Spiderman 3, para rato me la juego con esta y más con estas críticas.

    Dicho sea de paso la nueva de batman no me inspira confianza alguna,pero esa si que me la trago si o si xD

    ResponderEliminar
  12. Ohh, Spiderman 3... En medio de la película dije: "Buena la telenovela, oh wait... (facepalm)"

    Me agrado la pareja Gwen/Peter.

    Buena reseña El Tipo de la Brocha

    ResponderEliminar
  13. Saludos, yo en lo personal agradezco la participacion de gwen, una heroina que si ser una amazona se da el lujo de salvar en 4 ocasiones a Peter/SipderMan auque fuera de manera simbolica, tambien es una heroina que si puede llamarse asi, y no damisela en desgracia adicta a tirar la lagrima porque el protagonista prefiere salvar a la ciudad que ir a sus obras. creo q ella es lo mas rescatable de la pelicula, por lo demas coincido exactamente con lo expuesto.

    ResponderEliminar
  14. XD buenísima crítica. Me hiciste reír un buen rato.

    En fin, creo que el secreto para realmente disfrutar el reboot de la franquicia es no tomártelo enserio, ir en plan desenfadado y sin expectativas muy exigentes. A mi me encantó la película porque fui en ese plan, sin esperar que fuera buena y creo que eso ayudó mucho. Superó mis expectativas.

    En fin, buen review.

    ResponderEliminar
  15. eso del final es una referencia a Imagenes en accion?

    ResponderEliminar
  16. A mi me encantó la película y me gustó descansar de tobey maguire pero sobre todo de James Franco

    ResponderEliminar

LEE ESTO ANTES DE COMENTAR: Al autor del blog le chifla recibir comentarios, pero todo tiene un límite. Con carácter general, los siguientes comentarios se eliminarán de la faz de la red: 1) los que no tengan un carajo que ver con la entrada, 2) los que falten el respeto sin ninguna gracia ni elegancia, y 3) los que puedan considerarse spam o sean más largos que un día sin pan (en principio, los que superen 300 palabras, ya sea individualmente o de forma concatenada).