4 de octubre de 2012

Al filo del Infierno: Rock 'n' Roll Nightmare (1987)

Hay películas que te remueven el alma y cambian tu manera de pensar, que marcan un antes y un después en tu vida, y son capaces incluso de convertirte en una persona mejor.

De todas las maravillosas películas que han influido en mi manera de ver el mundo, ninguna ha sido capaz de hacerme reír y llorar y de enseñarme tanto sobre la vida como la que comentaré hoy.

Aunque no hay palabras que puedan describir la belleza de esta producción sin sonar de algún modo vacías, incluso mediocres, debo decir que después de verla por primera vez, pensé que fueran cuales fueran los retos a los que tuviera que enfrentarme en el futuro, sería capaz de superarlos.

O al menos eso es lo que me gustaría poder decir de esta basura de cinta. Pero no es el caso. Ni por asomo. Lo que sí puedo hacer es recomendar que nunca la veáis solos. Ni sobrios.

Rock 'n' Roll Nightmare, distribuida en España como Al filo del Infierno, sigue los pasos de un grupo de rock que se dirige a una casa de campo en Toronto para preparar su próximo álbum. Una vez allí, comen, beben, ensayan, fornican y son asesinados poco a poco por los esbirros de Satán.

Hecha esta introducción, preparaos para repasar conmigo lo más destacado de esta película.


#1. ¡THOR!


¿Os suena el nombre de Thor? Y no, no me refiero el dios del martillo y los relámpagos creado por Stan Lee, Larry Lieber y Jack Kirby en 1951 y sin presencia alguna en la mitología nórdica hasta esa fecha. Me refiero al otro Thor.

Exacto: Jon-Mikl Thor (en adelante, THOR), canadiense, culturista y cantante de gladiator rock y glam metal metido ocasionalmente a actor de películas de serie Z.

Apabulla, ¿eh?

The THOR.

THOR no solo interpretó al líder de los Tritonz delante de las cámaras, sino que detrás de ellas, también fue el guionista y el productor del filme. Y si algo nos ha demostrado la experiencia, aparte de que no puedes llegar a casa de trabajar a la una de la madrugada sabiendo que tienes que volver a la oficina a las seis de la mañana siguiente y aun así publicar tus entradas del especial de Halloween a la hora prevista, es que los cantantes solo deberían dedicarse a su música, y en ocasiones, ni siquiera a eso. Incluso podríamos poner en duda que THOR pueda calificarse de cantante. Yo canto a veces Paradise City en la ducha y eso no me convierte en Axl Rose.

Por supuesto, la banda sonora también corrió de cuenta del culturista canadiense (eso que se ahorraba en derechos) y, como señala su biografía oficial, "sus inspirados himnos metaleros, tan poderosos como el martillo encantado Mjolnir, hacen temblar los mismos salones del Valhalla". Claro que sí, si no te quieres tú, ¿quién va a quererte? Hay que ser positivos.


#2. La furgoneta de la banda


Tras un prólogo que puede o no venir a cuento en el que un ama de casa es devorada por su horno (algo casi tan esperpéntico como lo de aquel altavoz hambriento de Black Roses), pasamos a recrearnos durante cinco minutos con las imágenes de una furgoneta recorriendo las carreteras hasta llegar a la granja del viejo MacDemonio.

Cinco puñeteros minutos de una furgoneta en carretera.

Cinco. Minutos.

¡ABRUMADOR! ¡ELECTRIZANTE! ¡DESCONCERTANTE!

"Pero cinco minutos no son nada, Tipo de la Brocha. Eres un exagerado", me diréis.

¡Para nada! Cinco minutos es el tiempo que tarda el Imperio en abordar la nave rebelde al principio de La guerra de las galaxias, reducir a las tropas rebeldes en un tiroteo y capturar a la princesa Leia, todo ello mientras C-3PO y R2-D2 huyen con los planos de la Estrella de la Muerte a Tatooine. Y aquí, en cambio, lo único que vemos es una furgoneta circulando por la carretera sin rebasar el límite de velocidad permitido. ¿Os parece entretenido? A mí no.

Además, hay que tener en cuenta que la película, en su poco más de hora y cuarto, incluye también dos temas musicales completos que ocupan otros ocho minutos de metraje. Vamos, que entre pitos y flautas, Rock 'n' Roll Nightmare se queda en una hora escasa. Aunque, pensándolo bien, no sé si eso es malo.


#3. Marionetas satánicas


Los siervos del Diablo pueden adoptar cualquier apariencia que se les antoje, sirviéndose del engaño y la traición para matar a los miembros del grupo. Pero cuando nadie los mira, nos revelan su verdadera y aterradora forma..., que resulta ser la de unos graciosos monstruitos de látex manipulados a modo de marionetas fabricadas con calcetines.

No me lo invento. Aquí tenéis la prueba:


Temblaréis al verlos. De risa, claro.


#4. Diálogos terribles


La mediocridad del guión está garantizada en cualquier cinta de serie B o Z que se precie, y Rock 'n' Roll Nightmare no iba a ser menos.

Mi conversación favorita, por su inmediata absurdez, se desarrolla cuando un monstruo del averno se cena al mánager del grupo y la banda baja al sótano a investigar lo sucedido en plan equipo de Scooby-Doo.

"Vamos a buscarle arriba", dice Steve.

"Steve tiene razón", dice Randy. "Se habrá escondido por ahí".

"Ese grito se oyó en el sótano", conviene John Triton. "Está bien, buscaremos arriba".

Os lo repito por si no os ha quedado claro: como el grito del mánager vino del sótano, lo buscarán en la primera planta.

Pepitas de oro es lo que escribe THOR, sí, señor.


#5. Dee Dee


Aparte de un nombre retromongólico, Dee Dee, el único componente femenino de los Tritonz, tiene un cuerpo Danone, y además sabe cómo realzarlo vistiendo mallas de aeróbic superajustadas. Bien sabido es que el poder de las mallas unido al de los cabellos cardados es capaz de calentar la bragueta a cualquiera que lleve por estandarte la década de los ochenta, sobre todo si la chica siempre lleva las largas puestas.

Sin embargo, hay un lado de Dee Dee bastante conflictivo que puede conducir a varones heterosexuales y lesbianas a la quiebra sexual.

¡Es la Bruja del Oeste de incógnito!

Exacto. La chica es tan fea que inspira a los poetas notas de suicidio. Pero yo la quiero tanto como quise a Kimmy Gibbler en Padres forzosos.

Sí, almirante Ackbar, lo es.


#6. ¡Tetas!


Aunque la idea de instalarse en una casa perdida en mitad del campo era preparar sin distracciones su próximo gran éxito, los Tritonz dedican más tiempo a hacer el amor y a ser asesinados por las huestes de Belcebú que a su música. Y lo primero, como en toda buena peli de terror, suele conducir a lo segundo.

Las muertes son decepcionantes porque casi todas ocurren fuera de cámara, pero al menos la ración de pechuga es generosa. Y protuberante.

Destape gratuito de la perra en celo del grupo, y polvo en la ducha.


#7. Product placement descarado


No sé por qué, pero de repente tengo muchas ganas de beber Coca-Cola.



#8. Un final apoteósico


Como ya os he adelantado, la oscura fuerza sobrenatural que se oculta detrás de todas las muertes de la casa es el Diablo en persona. Llamadle Satán, Belcebú, Luficer, Abadón, Shaitan, Ahriman, Belial, Apolión, Asmodeo, Aniceto o como más os guste. A él le importa un pimiento mientras pueda cobrarse vuestras almas.

Pues bien, al final de la cinta, el rey de los demonios revela su verdadera forma para liquidar a THOR, último superviviente de la masacre. Y resulta que Satán es un moñeco.

¿Quién iba a sospechar que el Diablo tendría una granja en Toronto o que sería una marioneta de dudosa credibilidad? ¡Nadie! Pero mucho menos podíamos imaginarnos el giro que daría la película a falta de diez minutos para llegar a su desenlace.

Lo encontraron en un contenedor fuera de los estudios de Jim Henson.

Hasta que Satán aparece en escena, Rock 'n' Roll Nightmare es básicamente el típico slasher de serie B, esto es, una sucesión de tetas y muertes gratuitas sin apenas sentido; pero a partir de ese instante, todo cambia radicalmente con una gran revelación: THOR es en realidad el arcángel Tritón y los miembros de su grupo solo eran "sombras" creadas por él mismo para mantener ocupados a los siervos del Demonio hasta que este apareciera en persona.

Como decía Borja Pérez: ¡Toma, toma, toma, toma!

Así, tras otro tronchante diálogo, y ante un Diablo ojiplático, THOR se muestra como el arcángel sadogay que siempre fue, con capa, tanga de púas y litros de laca para el pelo. Alucinante.

¿Antónimo de sexi? THOR.

La campana suena y comienza el combate definitivo entre el Bien y el Mal. Los rivales se tantean intentando encontrar un hueco en la sólida defensa del contrario. Y en el caso de THOR hay muy poco que tocar que no esté pringado de aceite. La tensión podría cortarse con un cuchillo.

De pronto, Satán zarandea los palos que tiene por brazos y, ¡ZAS!, el ayudante de dirección lanza estrellas de mar de látex a THOR desde fuera de cámara.

Nuestro héroe agarra las estrellas al vuelo según se las van arrojando y luego, en una interpretación digna de un Oscar, se las restriega por el pecho como si le estuvieran atacando.

Es tan surrealista como cuando Bela Lugosi "luchaba" contra el pulpo de goma al final de Bride of the Monster.

Después de despedazar a las feroces estrellas del Infierno, THOR se abalanza sobre Satán y bailan con sus manos románticamente entrelazadas hasta que THOR, cansado de este juego, decide emplearse a fondo, supera la fuerza de un superguerrero que ha superado la fuerza de un superguerrero, y propina una secuencia de cuidadosos puñetazos a su adversario. Cuidadosos porque las marionetas de los chinos se rompen con nada, ya sabéis.

Y así, una vez más el Bien triunfa sobre el Mal.

Cutre, sí. Pero para haber rodado la película en una sola semana con menos de lo que cuesta el catering de otras producciones..., no es peor que una cistoscopia.

11 comentarios

  1. Buuuuuuuuuuuuf tiene pinta de horrenda. Cuanto alcohol es necesario para verla?

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  2. Buscar cistoscopia y arrepentirme de haberlo hecho... y no me engañan, este es el verdadero aspecto de Satán.

    Y esa tanga de púas, con un ligero error de movimiento y le juega a uno en contra; y además, usa una capa ¡UNA CAPA! Esos arcángeles no saben qué vestir en situaciones de combate.

    Esta película dudo mucho que la vea, lo dudo.

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  3. Secundo el comentario de Vladek.

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  4. La peli de terror empieza cuando Thor se pone el tanga.

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  5. Vladek: Más alcohol del que puede cargar una sola persona.

    LacraESECEFE: Vela, vela, vela... ¿Ya te he convencido?

    Roy D. Mustang: Tercio entre ambos.

    Anónimo: La escena de la ducha ya es bastante espansosa, la verdad.

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  6. Esta la pusimos en la primera edición de la Monstura, y aunque tiene sus momentos coñazo, con el final la gente flipaba. La pusimos ripeada directamente de mi VHS... tardé AÑOS en tenerla por fin en español. Estaba obsesionada con ella porque hará cosa de 11 años compré la banda sonora a 100 pesetillas y me gustó bastante... Pero claro, para encontrarla fue una odisea. Pero que satisfacción al final!

    ¡Viva Thor!

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    Respuestas
    1. Comprendo esa clase de obsesión. Yo llevo años buscando una película que vi en la tele cuando era un crío sobre un superhéroe galáctico que llegaba la Tierra. Se parecía a Superman, pero no recuerdo nada concreto. El día que la vea espero ser capaz de reconocerla.

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    2. No creo que sea, pero... puede ser SuperSonicMan?

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  7. Tipo de la Brocha, tengo 3 palabras para ti (para quitar el mal recuerdo): Hard Rock Zombies.

    Y si eso no amerita un post, en mi prox. comentario te listare los motivos por los cuales merece, no solo un post, UN BLOG ENTERO DEDICADO A LA PELICULA (con 1 post a medio escribir y un cierre precoz, obvio).

    Saludos desde el pais donde sale mas caro comer que en un restaurant de Nueva York, Argentina!

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    1. La tengo por ahí guardada. Quizá para el próximo especial de Halloween.

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    2. Bueno, lo importante es que esta :D

      Esperare ansioso el prox. Halloween.


      P.D: Tambien podrias comentar Trick OR Treat (la ochentera, no la nueva esa que confunde a los demas).

      Salud y asado!

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