Quizá ahora mismo os estéis preguntando si vuestro humilde servidor, el recalcitrante y rimbombante Tipo de la Brocha, no había escrito ya una reseña de El último deseo. Pues no lo dudéis más; la respuesta es sí. Y que me aspen si no lleváis mucho tiempo leyendo este blog, porque han pasado ya cinco años desde que lo hice. Quizá va siendo hora de premiar vuestra fidelidad. Os habéis ganado el espacio que hay entre este párrafo y el siguiente. Disfrutadlo.
Volviendo al tema que hoy nos ocupa, no solo es cierto que reseñé el primer libro de la saga de Geralt de Rivia hace unos años, sino que recientemente, después de releerme el libro en cuestión, también revisé y actualicé esa reseña para publicarla en Goodreads. Las opiniones pueden cambiar con el tiempo. Es más, algunas deberían hacerlo.
Pero esta entrada no pretende ser una tercera reseña del libro, sino un repaso de los relatos recopilados en él para allanar el terreno antes de que empiece la serie producida por Netflix, que podremos ver a partir del 20 de diciembre. ¿Que por qué me hago esto? Porque soy masoquista.
Al principio, solo pretendía tomar algunas notas para que, si al final me daba por recapitular la serie del brujo como hice con Juego de Tronos, pudiera comparar la adaptación con la obra original sin tener que echar mano constantemente de los libros (mis estanterías están guardadas por una esfinge disléxica, lo que hace de cada consulta una arriesgada y estúpida aventura). Sin embargo, a medida que avanzaba en esta tarea y el número de notas iba en aumento pensé: "Ya que estoy, ¿por qué no escribir una entrada completa en el blog resumiendo cada relato? Seguro que a más de uno le da pereza leerse los libros y le viene bien un poco de ayuda, sobre todo si no le preocupa comerse spoilers tan gordos como el de la carátula del DVD de El planeta de los simios".
Y aquí estamos ahora.
Pero antes de hablar sobre los relatos, conozcamos un poco más a su protagonista.