Hemos llegado a la entrada número 13. Un número fatídico, si sois supersticiosos. Un número como cualquier otro, si la superchería numérica no está en vuestros genes.
Recordáis el pergamino que encontrasteis en el taparrabos del bárbaro y lo sacáis de vuestro morral para examinarlo de nuevo:
👁 👁
♢ ☠
Dos ojos. Debajo del izquierdo, un diamante, pero podría representar cualquier joya; quizá una esmeralda. Debajo del derecho, una calavera con tibias cruzadas, que podría representar un sepelio prematuro.
Dais la vuelta al pergamino. Esperáis que al trasluz el dibujo se invierta 180º sobre la vertical, pero el grosor de la hoja lo impide.
Además, el pergamino tiene otra imagen pintada que no habíais advertido hasta ahora:
(‿|‿)
¿Es eso un...?
Termináis la pregunta por mí:
"¿Un culo?".
Podría ser.
Ahora tenéis las ideas más claras. Centráis vuestra atención en una de las esmeraldas.
Con la esperanza de que vuestra interpretación del jeroglífico sea correcta, insertáis la punta de la espada bajo el ojo derecho de la estatua, es decir, el que está a vuestra izquierda. El sudor os cae por la frente y se escurre sobre vuestros párpados. Os lo limpiáis con el dorso de la mano. Fue un error depilaros las cejas.
"¡BRAAAAWK!".
Oís sendos graznidos por debajo de vosotros, en estéreo (where available). ¡Son los flamencos disecados! ¡Han cobrado vida!
"¡Pero he resuelto el acertijo!", protestáis. "¡No es justo!".
Tenéis una idea infantil de la justicia que deberíais quitaros de la cabeza. Lo que consideramos justicia es, frecuentemente, una injusticia cometida en nuestro favor. La cita es de alguien más listo que yo y probablemente extranjero.
Los guardianes agitan sus alas y alzan el vuelo. Vuelan con menos gracia que el moscardón de la acelga, pero enseguida están sobre vosotros.
Soy consciente que a primera vista dos flamencos, por grandes que sean, no parecen la criatura más imponente y aterradora del mundo. ¿Qué cosa rosa lo es? Pero ¿os habéis fijado en sus picos? Quiero decir, ¿os habéis fijado de verdad? Esas córneas puntiagudas son más largas que vuestra espada y están diseñadas por la propia madre naturaleza para atravesar el caparazón de un cangrejo como si fuera papel cebolla.
Además, luchar colgado de un ídolo de metal, por la razón que sea, os resulta incómodo, así que vuestra Destreza en este combate se ve reducida en 2 puntos, esto es, de 12 a 10.
A pesar de todo, seguís siendo más diestros que este par pajarracos disecados. El primer guardián tiene 7 puntos de Destreza, y el segundo, 8. La Resistencia de ambos es la misma: 8.
Agarráis fuertemente la cuerda con una mano y sostenéis la espada delante de vosotros con la otra, interponiendo su filo entre las aves y vuestra persona.
"¡Aaah! ¡Vamos a palmaaar!", chilláis.
Vuestro grito de guerra os infunde un sucedáneo de valor con trazas de cobardía desesperada.
El terror tiene alas y es de color rosa. |
El primer flamenco cae bajo vuestra espada sin que os rompáis una uña siquiera. Sin embargo, su pareja se debate con una energía salvaje. Durante el intercambio de golpes, acabáis con el coco como un fresón maduro. Pero aunque los dados no os sean tan favorables como en el encuentro con los orcos, os sobreponéis a los picotazos y lucháis con una tenacidad rabiosa hasta que la segunda bestia también muerde el polvo.
Este es vuestro parte de salud:
- Destreza: 12
- Resistencia:
1711 - Suerte: 9
¿Es masa encefálica eso que os sale por la oreja?
Sudando como una mula vieja, con la respiración agitada, contempláis a los guardianes derribados desde lo alto de la estatua. Están espatarrados en el suelo, chafados e inmóviles. No sé si sabíais que hoy día ya hay más flamencos ornamentales que flamencos auténticos. Quizá ese dato os entristezca.
Escupís un par de plumas rosas.
O puede que un par de pájaros muertos os traiga sin cuidado.
Volvéis a concentraros en la tarea que teníais entre manos antes de que os interrumpieran. Aplicáis la punta de la espada entre la joya y el párpado del guardián, y hacéis palanca. Un poco de presión y...
¡PLOP!
La esmeralda sale con facilidad, dejando al ídolo más tuerto que una cerradura. Para vuestro alivio, la cuenca del ojo del ídolo es lisa y no esconde media docena de víboras venenosas a presión. El peso de la joya se siente bien en vuestra mano.
Orgullosos de haber resuelto este acertijo, os guardáis la esmeralda en el morral. Tenéis la sensación de que este objeto os será MUY útil más adelante (al menos si sobrevivís el tiempo suficiente). Si esto fuera un videojuego, habríais desbloqueado un logro. Como no lo es, lo único que está en mi mano es pediros que por favor os aplaudáis vosotros mismos.
¿Qué haréis ahora?
- Intentar sacar la otra joya. Si podéis llevaros las dos, ¿por qué conformaros con una?
- Bajar del ídolo de una santa vez. Asumiendo que los flamencos homicidas fueran la opción buena, no tenéis la menor intención de averiguar cuál es la mala.
Tenéis hasta el lunes 20 a las 12:00 CEST para votar. En Twitter podéis hacerlo aquí.
Aqui si que hay que hacer caso al bendito pergamino. El de la izquierda ponía joya, el otro muerte, nada de pájaros que se abaten con relativa facilidad. Como joya ya tenemos y muerte no queremos, pues me bajo del ídolo y me voy silbando mientras saco brillo a la esmeralda villalobos.
ResponderEliminar¿Desde cuándo una calavera con tibias cruzadas representa la muerte? A lo mejor entabláis amistad con un pirata.
EliminarAle! Me gusta que los planes salgan (aproximadamente) bien. A explorar el laberinto, que la otra joya ya la tenemos repetida.
ResponderEliminarLa cita más popular de Hannibal debería ser esa.
Eliminar¿Y no lo es? Acabo de comentar sin leer a nadie antes y resulta que yo también la he puesto. ¡Qué poco original!
Eliminar¿Es cosa mía o esta entrada y la anterior tiene respuestas bastante obvias? A menos que queremos que nuestro avatar muera, lo lógico es bajar del ídolo y seguir nuestro paseo. Por cierto, no nos vendría mal tomar alguna de las raciones de comida por si acaso, ¿no? Así evitamos morir en una trampa que haga 12 puntos de daño de golpe. ¿O creemos que tendremos la suerte de encontrar algún vaso con un líquido sanador? No confío en la suerte, y tampoco en los flamencos, malditos pájaros rosa, alguien que esconde algo tan evidente como una pata te hace replantearte que más podrá esconder.
ResponderEliminar¿Respuestas obvias? Noooo, qué va. Es cosa tuya.
EliminarMiro la esmeralda del otro ojo con terribles ganas pero me bajo maldiciendo al buda, a los flamencos y a todo lo maldecible. Prudencia es mi segundo nombre.
ResponderEliminar¿Kamikaze Prudencia? Menuda dicotomía.
EliminarBueno, se trata de ser prudente a la hora de inmolarse... eso y que recibí un nombre de cada padre
EliminarCaray con los flamencos que se han puesto ídem, bajar del ídolo es la mejor opción...
ResponderEliminarMe olvidé de mencionar que durante la pelea suena Entre dos aguas, de Paco de Lucía.
Eliminar🤭👍no esperábamos menos
EliminarPues a mi me surge la duda de si el pergamino indicaba que una joya se podía conseguir y la otra no... o si indicaba el orden a seguir para cogerlas, entendiendo que coger primero la del ojo sobre la calavera sobre dos tibias era incorrecto y había que empezar por la otra. Pensándolo bien me parece muy rebuscado esto último, por lo que voto por bajarnos del ídolo y seguir nuestro camino con una sola joya y con la creencia de que no somos tan avariciosos como pensábamos.
ResponderEliminarTambién espero que encontremos pronto un sitio donde nos entre hambre y poder picar algo, que hemos perdido bastante resistencia. ¿Vas a usar la Suerte en Combate como se explica en algunos librojuegos de Fighting Fantasy, Tipo de la Brocha? Igual llega el extremo que nos hace falta.
Solo uso la Suerte en los combates si estoy desesperado. Muy desesperado. Restar 1 punto extra de Resistencia solo merece la pena en combates en los que hay una probabilidad alta de que te curtan, y perder 3 puntos de Resistencia en vez de 2 es un coste muy alto. Además, conviene que la Suerte sea alta a lo largo de toda la aventura para superar las pruebas de Suerte.
EliminarPues el complicado texto que nos ha llevado hasta aquí sugiere fuertemente que es sólo una joya por cliente (aunque todavía no tengo claro si hemos elegido bien). Así que mejor paramosaquí nuestra desacralización del lugar, y de paso dejamos algo para el siguiente incauto, er, quiero decir heroe.
ResponderEliminarTodo se aclarará en la próxima entrada.
EliminarYa nos hemos arriesgado bastante con una sola joya y unos miserables flamentos nos han dado una pequeña tunda, como se despierte el buda gigante nos va a usar como mondadientes, asi que mejor bajamos de la estatua y seguimos en busca de mas chiripitiflauticas aventuras.
ResponderEliminar¿"Pequeña" tunda? Vuestro avatar discrepa.
EliminarSacar la joya! Que puede malir sal?
ResponderEliminarEs un secreto.
EliminarPajarracos asquerosos.
ResponderEliminarPues yo digo que le dejemos la joya a otro héroe, a ver si así se autoelimina y hay menos competencia.
Te adelanto que la mayoría de vuestros contendientes no necesitan mucha ayuda para autoeliminarse.
EliminarNos descolgamos del ídolo.
ResponderEliminarQué amables son siempre los enemigos de estos libros por ponerse en fila para que los acuchillemos en orden.
Ojo, que algunos de estos librojuegos tienen reglas para pelear con varios enemigos al mismo tiempo en lugar de por turnos. Y es un peligro.
Eliminar¿Hemos matado a los flamencos?¿Por qué? Pobrecillos, seguro que solo querían jugar. Ahora me siento fatal. Voto por bajar de la estatua y donar la edmeralda a la primera asociación de huérfanos de aves ridículas que nos encontremos.
ResponderEliminarLos flamencos son efectos digitales. Ningún animal de verdad fue dañado durante la producción de estas entradas. Excepto una mosca que se coló mientras escribía y no quiso salir de casa por las buenas.
EliminarBah, ahora que por fin nos van bien las cosas y tenemos la jubilación en la palma de la mano, es mejor no arriesgarse de más. Yo voto que dejemos el ídolo en paz y no tentemos aún más a nuestra suerte.
ResponderEliminarEl sueño de todo aventurero: vivir emociones y luego, lo antes posible, de las rentas.
EliminarBajar del ídolo de una santa vez.
ResponderEliminarY hacer un guiso con los dos flamencos, hay que aprovecharlo todo.
Un guiso de flamenco suena bien. Lástima que no llevéis encima una cazuela.
EliminarNo llego a tiempo para votar pero me parece bien la opción mayoritaria de no suicidarnos.
ResponderEliminarNo suicidarse siempre es la mejor opción.
Eliminar¿Estamos fuera de plazo? Estamos fuera de plazo. Mecachis. Íbamos a votar por dejar las joyas en paz pero parece que es lo que va a salir de todas formas. Me encanta que los planes salgan bien.
ResponderEliminarA veces la solución a un problema es no hacer nada. Algunos son expertos en eso.
EliminarVoto por arrancar la otra joya, hacerle un "teabag" testicular en la cara de la estatua y bajar haciendo un mortal hacia atrás.
ResponderEliminar¿Cómo, que estoy fuera de plazo? Vaaaaaaya por Dios, en fin, pues parece que nos bajamos sin más, panda de sosos...
Es frustrante, ¿verdad?
Eliminar